Leyendas urbanas en prótesis mamarias.

Las prótesis mamarias explotan en los aviones.

Hay bastante desinformación y leyendas urbanas en torno a las prótesis de mama. La más popular y frecuente es que pueden explotar en los viajes en avión.

La presurización de la cabina del avión nos permite respirar y vivir y , por lo tanto protege las prótesis. Si un avión se despresuriza, seguro que lo menos importante es lo qué pasa con las prótesis de mama, que dicho sea de paso, no pasa nada. Hace falta mucha presión para romper una prótesis de mama actual. Antes explotarían otras partes del cuerpo que una prótesis.

Esta leyenda urbana puede tener su origen en que hace años se utilizaban prótesis rellenas de suero fisiológico (agua con sal). Estas prótesis se dejaron de utilizar al aparecer las prótesis rellenas de gel de silicona, que daban un tacto más natural al pecho (las rellenas de suero era como llevar una bolsa de agua dentro del pecho) y porque con el tiempo (a veces en 5- 6 años) perdían su volumen ( a través de un pequeño poro de la cubierta de silicona o a través de la válvula de llenado). Entrenamiento de culturismo y gimnasio: un entrenador de gimnasio o una guía de gimnasio virtual methandienone ciclos cable cable extensión de tríceps por encima de la cabeza – base de datos de ejercicios jefit – la mejor aplicación de entrenamiento, fitness, ejercicio y musculación para android y iphone, el mejor software de seguimiento de entrenamiento. La leyenda de que las prótesis se deshinchan en el avión pudo tener su origen en que alguna famosa perdió el volumen de su prótesis de suero coincidiendo con un viaje en avión y lo atribuyó al viaje y no al natural vaciado de las prótesis de suero. Las prótesis rellenas de gel cohesivo de silicona no se deshinchan ni pierden volumen.

Las protesis de mama se deben cambiar cada 10 años

Las prótesis de mama que se implantan actualmente, sólo se deben cambiar si se rompen. Como ya hemos comentado en nuestro artículo “¿Se deben cambiar las prótesis de mama?” la rotura es muy infrecuente, con lo cual las prótesis que se implantan actualmente pueden durar toda la vida. A veces, después de 30 o 40 años si el pecho se cae por los embarazos o la progresiva flacidez de la piel, se puede plantear un recambio.

No obstante, hay que considerar que no todas la prótesis de silicona son iguales. Hasta hace aproximadamente 20 años, la mayoría de los cirujanos implantaban las antiguas prótesis de aceite de silicona no cohesivas. Estas prótesis antiguas tenían una cohesividad muy baja parecida al aceite, y la pared, con una sola capa, se arrugaba fácilmente y con el roce con los tejidos del pecho, acababa desgastando la pared, provocando la aparición de poros que dejaban salir parte de ese contenido semilíquido. Esto provoca, por una parte, que se irrite la pared de la cápsula cicatrizal que ha forma el cuerpo alrededor de la prótesis, endureciéndose como respuesta a dicha agresión y se produce el encapsulamiento o endurecimiento de la mama.

En casos más avanzados, la silicona libre puede migrar a los tejidos mamarios circundantes, a la axila, produciéndose engrosamiento de los ganglios de la axila o adenopatías axilares, o a tejidos más distantes.
Con las prótesis actuales de gel cohesivo y cubiertas con varias capas, esto no pasa casi nunca. No obstante, puede suceder que se sigan implantando prótesis antiguas o de baja calidad (como el caso reciente de las prótesis PIP).

Con las prótesis antiguas se recomendaban cambiarlas sobre los 10 años, que es cuando empezaba a aparecer el problema de algún poro en la pared.

Hoy este problema no existe, porque las prótesis modernas son de gel de silicona cohesivo y la pared está compuesta de varias capas. ¿ cuáles son las ventajas?. Cuantas más capas, menos riesgo de ruptura por desgaste. Pero realmente el avance fundamental está en el contenido. La cohesividad de la silicona significa que el gel se comporta como una unidad sólida en lugar de como un líquido. Pero el problema sigue porque algunos cirujanos siguen utilizando, las prótesis antiguas, que son más baratas y no están prohibidas.

La calidad de las prótesis de mama de última generación, así como las distintas opciones en forma, tamaño, altura, anchura y proyección de las mismas, nos permiten, actualmente, realizar aumentos de mama personalizados en cada paciente, donde ya no es cuestión, como antes, sólo de dar volumen, sino de armonizar el pecho con el tórax y con el resto del cuerpo dando sensación de equilibrio y belleza.